La Reserva Andalucía - El Castillo de las Guardas, Sevilla

Walter Picone Ferrari

Precioso espacio natural con animales bien cuidados aunque algún recinto se me queda corto como el tigre, pero un espacio precioso para la familia, parejas o en solitario, solo me faltó los servicios de dentro del recinto estén operativos al comienzo del día.

Eva Z

Una experiencia muy agradable! Los animales parecen bien cuidados. El camino en coche todo bien, no hay perdida porque esta todo señalizado. Lo que si pensábamos que tardaríamos mas en acabar la visita, pero en cosa de hora y media acabamos el paseo en coche. Sin espera porque compramos las entradas online, sino hay que hacer cola.

Jess

Me ha encantado el sitio, es muy grande y la ruta es en coche pero hay zonas en las que está permitido bajarse del coche para ver a los animales más cerca.
He leído en reseñas anteriores que no han visto a guardas controlando y la verdad es que no puedo decir lo mismo porque había chicos en moto dando vueltas vigilando que la gente cumpla.
Nadie de los coches de mi recorrido se ha bajado cuando no debía.
En cuanto a sobre alimentar a base de zanahorias... Pues no sé, ellos tampoco dicen que no y al fin y al cabo, son zanahorias! No azúcar.
El único pero que le pondría, es que los baños que están más cerca del anfiteatro, no tenían jabón ni papel y algunos de ellos no cerraba la puerta bien o no funcionaba la cisterna. Cosas solucionables.
Recomiendo ir pronto porque luego hay mucha gente.

Celia Vivas

Fuimos un sabado, medio lluvioso, aunque finalmente apenas chispeo.
Lo considero caro para lo que es ya que el gasto de gasolina lo hace un mismo, y el de comida para animales también.
A lo largo del recorrido ves pocos trabajadores del parque.
Los animales muy bien, aunque siempre ves mas o menos los mismos, hasta que llegas a las jirafas que es super bonito. El elefante que vimos se le veia bastante estresado, teniendo en cuenta que estan en semi libertad.
El restaurante del lago de 10 buenos precios buena comida.
Recordar llevar suficiente zanahorias y lechuga, nunca os va a sobrar y alli son caras las que venden

Fran Tirado Torres

Está muy guay, fuimos entre semana y apenas había gente. Se le puede dar de comer a los animales aunque hay restricciones que vi a mucha gente saltarse (no seáis esos). No limpies el coche antes de ir como recomendación, pues seguramente algún animalejo os llene el cristal de babas.
Se puede almorzar dentro y de precio no es muy caro.

Monica 99

Le doy un tres porque a pesar de la experiencia tan única y diferente que es, considero que no hay nada de atención del personal. Gente bajándose de los coches donde estaba terminantemente prohibido (ocasionando bastante atasco y pudiendo provocar cualquier situación no deseada), y no había ni una sola persona para controlar nada. Tampoco sé hasta qué punto es bueno cebar a los animales a zanahorias, aunque había gente que les daba de todo, y lo mismo, 0 interés por el bienestar de las criaturas. Por otro lado, el corral donde se encuentran las cabras es otro descontrol, hemos visto como habían un par de crías (aún con el cordón colgando), y muchísima gente persiguiéndolas para cogerlas para hacerse la fotito, haciéndolas llorar incluso, cuando en un cartel se especifica claramente que NO se las puede tocar o coger, y mucho menos perseguir, ¿por qué no hay ningún trabajador vigilando? La experiencia en sí es increíble y la recomiendo, por supuesto, pero hay detalles que se podrían solventar con un poco más de implicación e interés, a mí desde luego me han impedido disfrutar al 100% de todo. Espero que se tenga en cuenta, porque creo que es bastante importante que los animales estén bien, ya que no pueden estar en su hábitat natural (que es como debería ser).

JESUS CALLEJA

Visita muy interesante, permite ver de cerca bastantes animales normalmente salvajes, aunque estos no solo están habituados a los humanos, parecen bastante dependientes de la comida que les dan los visitantes.
Las visitas no son muy respetuosas con las normas y aún con advertencias como "Las cebras muerden" les dan comida y abren las ventanillas de los coches. Tampoco respetan la circulación dejando libre el lado izq.
El parque podría ser mejorado y los caminos mejor mantenidos, ya que el precio es bastante alto.

María Rebollo Ramos

La reserva nos gustó mucho, volveríamos en época de menos calor.
Los animales están bien cuidados, los tratan con cariño y los cuidan, incluso los han rescatado de malas condiciones.

Lo que nos resultó abominable fue el comportamiento de algunos visitantes.
A la entrada te dan la posibilidad de comprar zanahorias para alimentar a los animales, ahí especificaban que no se podía alimentar a las jirafas por problemas médicos/veterinarios. Lamentablemente, vimos de todo y la gente no hacía caso.

Hay gente que daban zanahorias a las jirafas( a pesar de la contraindicación), zanahoria a los leones, patatas fritas de bolsa a los monos, espaguetis a los patos, cisnes, lémures (éstos últimos tenían una dieta especial) y pan a todos: ciervos, llamas, monos, patos…

Como sugerencia, se debería controlar lo que la gente da a los animales. Ya que hay mucha falta de cultura, de sentido común y de respeto a los animales.